Frente al Adelantado he comprendido que la máxima obra propuesta al ser humano es la de forjarse un destino. Porque aquí, en la multitud que me rodea y corre, a la vez desaforada y sometida, veo muchas caras y pocos destinos. Y es que, detrás de esas caras, cualquier apetencia profunda, cualquier rebeldía, cualquier impulso, es atajado siempre por el miedo. Se tiene miedo a la reprimenda, miedo a la hora, miedo a la noticia, miedo a la colectividad que pluraliza las servidumbres; se tiene miedo al cuerpo propio, ante las interpelaciones y los índices tensos de la publicidad; se tiene miedo al vientre que acepta la simiente, miedo a las frutas y al agua; miedo a las fechas, miedo a las leyes, miedo a las consignas, miedo al error, miedo al sobre cerrado, miedo a lo que pueda ocurrir.
El Miedo
Alejo Carpentier (Los Pasos Perdidos)
Sensacional, muy bien escogido este fragmento, amigo Alejandro.
Hace años leí esta novela y ahora, al releer este fragmento seleccionado por ti lo he recordado, pero es un texto que casi tengo olvidado y realmente me parece magnífico. Carpentier es de los grandes, sin duda, y esta y otras novelas suyas lo prueban.
El miedo… Es terriblemente cierto lo que dice. Le tenemos miedo a casi todo y eso nos impide, en gran partem forjarnos nuestro propio destino. ¡Y cómo transmite la sensación de calor en sus páginas!, por citarte otro aspecto que casi todos los grandes escritores hispanoamericanos consiguen en sus narraciones.
Gracias por la cita y por todo, amigo.
Hasta pronto
Gracias por tu visita del otro día, amigo Alejandro.
Yo también aprendo mucho leyendo tu blog. De hecho, ya he descubierto muchas referencias a libros y autores que desconocía o no había leído.
Abrazos