De Takeshi Kitano. 2008. Autoreferencial. Autobiográfica. Exagerada. Muy exagerada. Tan exagerada que muchas situaciones macabras resultan graciosas. Excelente película. Con ella pensé sobre el arte, la subjetividad, la crítica, las metas. Pero sobre todo, me hizo pensar que a veces nos dedicamos a “correr detrás de tortugas”, tonta e infructuosamente. Me encantó.